Este curso, con los alumnos de 2º ESO B, de los cuales soy tutor y profesor de Matemáticas estamos introduciéndonos, en los pocos momentos en que podemos estar relajados ya que son numerosas las actividades que tenemos que hacer, en la Astronomía.
Los motivos por los que quiero introducir a los alumnos son varios: es una ciencia que es prima hermana de las Matemáticas y me permite dar ejemplos para mi asignatura, también, la simple observación del cielo en una noche es una de las más maravillosas experiencias que podemos tener (gratuita además) y si además comprendemos lo que vemos ¡qué más podemos pedir! y, por último, este acto de reflexión, de interiorización, realizado por un grupo de adolescentes acostumbrados a vivir deprisa y en ocasiones con poca meditación de sus actos me parece un gran aprendizaje.
Para intentar acercarnos a tal comprensión, además de aprender a identificar las constelaciones más famosas, construir un mapa del cielo y conocer la mitología asociada a ellas (podéis ver el trabajo que llevamos hecho aquí), estamos leyendo en una de las horas semanales de desdoble que tenemos en la asignatura de Matemáticas, el libro Kepler y los planetas de la editorial El rompecabezas y cuyo autor es Esteban Rodríguez Serrano.
Junto a la lectura del libro comentamos y proyectamos imágenes de personajes de la historia de la Astronomía (Kepler, Tycho Brahe, Copérnico,...) y que aparecen en la novela, de los lugares donde vivió y trabajó Kepler (Weil der Stadt, Tubinga,...) y de conceptos matemáticos y astronómicos que los expliquen o clarifiquen (poliedros regulares, elipses, eclipses, paralelaje,...). Esto, creo, está enriqueciendo la historia y haciéndola percibir más próxima a los alumnos.
En los próximos días, en forma de comentario, irán apareciendo resúmenes de los alumnos de los distintos capítulos del libro. Espero que estos resúmenes os acerquen a la historia de este gran astrónomo y quizás os anime a su lectura.Si es así el libro está esperándoos en nuestra biblioteca. No dudéis en acercaros a hacerle una visita.
Capítulo 9: Astrología
ResponderEliminarKepler, además de enseñar, tenía que formular pronósticos meteorológicos. Debía elaborar un calendario con información meteorológica, las cosechas, las batallas, epidemias,…. Predijo un frío terrible y una invasión turca para el año siguiente, y su predicción se cumplió. Los clérigos y gobernadores, empezaron a pedirle horóscopos a partir de su fecha de nacimiento. Siempre lograba satisfacer y acertar con las predicciones de sus solicitantes. A Kepler le entusiasmaba escribir cartas; se comunicaba por correspondencia con su familia de Weil der Stadt y con el profesor Mästlin de Tubinga. También mediante el correo, se comunicaban los científicos de toda Europa, y Kepler comentó a Mästlin su deseo de conocer las observaciones astronómicas de Tycho Brahe, un gran científico danés que poseía información precisa de la posición y movimiento de los planetas.
Capítulo 7
ResponderEliminarKepler, al acoger las teorías de Copérnico y seguir las clases de Mästlin, supo que las viejas teorías astronómicas no eran ciertas.
A Kepler no le gustaban nada las disputas religiosas, aunque él era luterano, reconocía los errores y las partes de razón de cada religión, así que prefería mantenerse al margen cualquier disputa.
Una mañana le llamaron los profesores de la universidad para ofrecerle un puesto de profesor de matemáticas en la universidad de Graz, que acabó aceptando. Los profesores habían decidido que Kepler era la persona más apropiada para ese empleo.
RESUMEN CAPITULO 2 KEPLER Y LOS PLANETAS
ResponderEliminarJohannes Kepler nació el jueves 27 de diciembre de 1571. Él vivía en un pueblo pequeño alemán llamado Weil Derstadt.
Las casas estaban construidas sobre una pendiente y un valle donde había un riachuelo y casas con ventanas rectangulares y tejados puntiagudos, y una muralla que rodeaba todo el pueblo.
El pequeño Johannes había nacido demasiado pronto y su cuerpo era menudo y vulnerable.
A los 4 años sufrió la viruela, una peligrosa enfermedad que lo dejó débil y miope, y sus padres no le prestaban atención porque siempre discutían y el padre le contestaba de mala manera.
Un día la madre se llevó a Johannes a lo alto de la torre y vieron un eclipse y la madre de Johannes le dijo a su hijo que era un aviso del cielo de que algo malo pasaría, una guerra o algo parecido, Johannes no tenía miedo, porque peor no le podía ir.
Capítulo 10: La familia Kepler
ResponderEliminarLa familia de la esposa de Kepler era rica, y eso favorecía a Kepler ya que su sueldo era inestable.
Su mujer dio a luz varias veces pero dos de sus hijos murieron y la pareja entristeció. En la ciudad, los católicos y los protestantes reñían continuamente.
Algunos religiosos le insistían en seguir la religión de la que ellos eran pero Kepler estaba de acuerdo con las tres religiones, pensaba que las tres tenían parte de razón y que los astrónomos eran predicadores de Dios que leen el libro de la naturaleza.
A pesar de sus explicaciones había clérigos que le decían que se dedicase a las matemáticas y no decidiera por sí mismo sobre la religión pero Kepler amaba la verdad sobre todas las cosas y creía que la ciencia honraba a Dios y resultaba útil para los hombres.
Los tres bandos religiosos querían al inteligente matemático con ellos, Kepler era luterano pero también creía que los católicos y calvinistas acertaban en algunas cosas.
Finalmente, los católicos gobernaron Graz y expulsaron a los demás de la ciudad, el matemático perdió su empleo. Él y su familia abandonaron la ciudad sin saber a dónde dirigirse.
Capitulo 4: La escuela latina
ResponderEliminarJohannes destacaba como alumno serio, inteligente y aplicado. En la escuela latina aprendía latín.
Ayudaba a sus abuelos en las labores del campo y en la posada, por esa causa a veces faltaba a clase.
Era luterano y asistía a las ceremonias religiosas. Los alemanes estaban separados en dos bandos: católicos y protestantes que se dividían en luteranos y calvinistas.
Un día un profesor fue a la posada, donde vivía Johannes con su madre y sus hermanos Margarete y Christoph. El profesor le dijo a su madre que su hijo amaba a Dios sinceramente y que debería ir a la universidad luterana de Tubinga y estudiar para predicador. Johannes estaba muy contento al oír la noticia y su madre le dijo al profesor que sí, que su hijo seria un buen predicador.
CAPÍTULO 8: GRAZ
ResponderEliminarKepler se dirigió hacia Graz una ciudad construida a las orillas del río Mur donde enseñaría matemáticas y estaría al servicio de los gobernadores.
Los alumnos tenían dificultad para seguir las explicaciones que daba en clase, pues a él siempre se le ocurrían ideas diferentes y se preguntaba a sí mismo porqué las cosas no podían ser de otra manera de la que explicaban los libros.
Kepler animaba siempre a los alumnos para que pusieran más interés en investigar el porqué de las cosas que él explicaba en clase. En ese momento un alumno le preguntó: ¿Cómo se mueven los planetas en el universo? Entonces el maestro le contestó, la solución está en encontrar figuras geométricas que definan la forma y el tamaño de las órbitas planetarias y esas figuras podrían ser los llamados poliedros regulares.
El maestro publicó un libro donde compartía todas las teorías sobre el universo, pero comprendió que no era suficiente todas las ideas y cálculos que podía aportar un modesto profesor de escuela, y que nunca llegaría a saber la verdadera verdad de las teorías sobre el universo.
CAPITULO 6
ResponderEliminarEste capítulo explica algunas de las características de Johannes. Estudiaba en una pequeña habitación, tenía discusiones y problemas con sus compañeros, tenía una frágil salud, su piel se llenaba de granos y manchas y sentía punzadas en el estómago, fiebre o dolores de cabeza además de una vista muy mala. También habla de la clase que tuvo con su profesor favorito Michael Mästlin que le explicó que la biblia no decía toda la verdad y que los demás astros no giran alrededor de la Tierra sino que los astros al igual que la Tierra giran alrededor del Sol formando círculos perfectos y que a la vez la Tierra giraba sobre si misma. Mientras Michael Mästlin explicaba esto Johannes miraba hipnotizado y sentía que la naturaleza era hermosa, armónica y deslumbrante. Todo esto lo explicaba Mästlin con las luces apagadas y todas las ventanas cerradas, con una lámpara en el centro e imitando los movimientos de los astros con una bolas.
1. EL MISTERIO DE LOS PLANETAS
ResponderEliminarEn la antigüedad, los hombres miraban al cielo e intentaban resolver qué eran las cinco estrellas diferentes a las otras (planetas). Los romanos les pusieron nombres de dioses: Mercurio, al más rápido; Venus, al que más brillaba; Marte, al rojo (color de la sangre); Júpiter, al más grande; Saturno, al más lento.
Los griegos pensaron que la Tierra era el centro del universo, pero Aristarco dijo que era el Sol y nadie le creyó. Más tarde, Nicolás Copérnico, volvió a decir lo que Aristarco había dicho hace tiempo, y eso entusiasmó a muchos, pero otros seguían creyendo que el centro era el Sol. Así, que el misterio estaba sin resolver.
Capítulo 9:
ResponderEliminarEl científico danés llamado Tycho Brahe era un gran observador de las estrellas y poseía mucha información sobre la posición y el movimiento de los planetas.
Kepler manda un mensaje a su profesor, Michael, diciéndole que espera que algún día pueda describir el modelo que explique con absoluta precisión la organización de nuestro Universo.
Capítulo 19: La bruja
ResponderEliminarCuando el emperador Rodolfo murió, Kepler abandonó Praga para vivir en Linz. Allí recibió una carta de su hermana diciéndole que el consejo de Leonberg había acusado a su madre de bruja y querían quemarla en la hoguera. Kepler viajó a Weil der Stadt y el día del juicio estuvo con su madre y sus hermanos.
La principal acusación la formuló una mujer viuda con mala reputación y que no estaba muy bien de la cabeza. La acusó de preparar bebidas que envenenaban, de enseñar hechizos y de atravesar puertas cerradas.
Kepler defendió sabiamente a su madre y ella también habló.
El consejo decidió que la señora Kepler sería interrogada bajo tortura. Cuando le mostraron los martirios que la esperaban, ella se arrodilló en el suelo y rezó una oración, entonces el juez ordenó que la llevaran a su celda.
El juez leyó la sentencia definitiva: al soportar el miedo a la tortura con entereza cristiana, la señora Kepler regresaría con su familia, siendo libre de nuevo.
CAPÌTULO19: LA BRUJA
ResponderEliminarDespués de la muerte del emperador Rodolfo Kepler abandonó Praga, pues necesitaba ganar dinero para así mantener a toda su familia. La ciudad a la que se dirigía Kepler era Linz, una ciudad pequeña y en la que había poca gente para poder conversar sobre lo que realmente a él le gustaba que fuera las matemáticas o astronomía. Kepler recibió una triste noticia pues su madre fue acusada de brujería, y tuvo que emprender viaje a Leonberg.
El día del juicio todos los hijos estaban con su madre, en el juicio se acusaba a la señora Kepler de haber envenenado la bebida que había ofrecido a una viuda que la había invitado a que la viera en su casa.
La viuda siguió con la acusación hacia la señora Kepler y dijo que le había enseñado un hechizo para bendecir niños pero le fracasó con un niño que había llevado al cementerio y allí murió. La madre de Kepler no pudo aguantar más las acusaciones que le estaba diciendo, y gritó ¡esta mujer está loca! Y me odia.
El juez que estaba cansado por las interrupciones dijo que prosiguiera la acusación sobre la señora Kepler, entonces volvió a hablar la viuda que dijo haber visto a la señora Kepler atravesar una puerta cerrada y pedir al enterrador el cráneo de su propio padre, tras estas palabras la viuda dio por finalizada la acusación.
Entonces entró a declarar la señora Kepler diciendo que esta viuda no había enfermado por lo que bebió en su casa sino por meter a todos los soldados vagabundos en su casa.
Luego le llegó el turno a su hijo Kepler que añadió que su madre solo inventaba remedios caseros para poder curar a la gente enferma. Tras la intervención de Kepler se reunieron el juez y los consejeros y dictaron un veredicto, que fue el interrogar bajo tortura a la señora Kepler para que dijera la verdad.
Finalmente fue conducida a la cámara de torturas enseñándole todo lo que le podía pasar si no decía toda la verdad, pero la señora Kepler se mantenía firme en que ella era inocente, entonces el juez se volvió a reunir con los consejeros y decidió absorberla de todas las acusaciones realizadas sobre ella y finalmente la dejó en libertad.
CApitulo 15:matematico imperial
ResponderEliminarEL MATEMATICO IMPERIAL
El emperador Rodolfo convocó a el matemático imperial al palacio de Praga .Los criados le condujeron a una habitación con estanterías llenas de manuscritos y libros. Kepler esperó varias horas .Después apareció el emperador un hombre gordo y barbudo que estaba vestido muy elegantemente y con un collar de oro. Kepler se arrodilló y le beso los pies .Que desgracia la muerte del maestro Brahe –comentó el emperador –En fin.....aunque no era un hombre capaz de vivir sin discutir con los hombres de alta posición, pero era un científico ilustre. Cuando acabó Kepler dijo-Yo estoy dispuesto a seguir con los trabajo de mi maestro .De acuerdo Kepler, ¿qué necesitaras? Necesitaré gente que observe el universo porque yo ya no estoy capacitado para hacerlo. El tesoro imperial ha conocido tiempos mejores pero te proporcionaré lo que has pedido. Kepler fue entonces al castillo y cogió los datos que a lo largo de los años había recopilado Brahe, mientras que los hijos de Brahe cogieron los instrumentos astronómicos .Días más tarde Kepler descubrió que ser matemático imperial no era tan bueno porque el emperador se retrasaba en los pagos o no le pagaba. Entonces se presentaba en el palacio y reclamaba, pero él solamente era un pequeño matemático y rara vez cobraba. Tampoco tenía ayudantes ni instrumentos que se quedaron en poder de los hijos de Brahe. Además quería comprarse el nuevo invento el telescopio.
Capítulo 20: Ley armónica
ResponderEliminarKepler quería publicar en un libro sus descubrimientos para que los interesados en astronomía pudieran conocer sus progresos científicos pero el odio entre los cristianos se hizo insostenible y estalló una guerra en Alemania.
Él ansiaba la publicación de su libro y la paz en el país.
De hecho, ya había descubierto una nueva ley sobre el movimiento de los planetas y la más importante:
El cuadrado del periodo orbital de un planeta es proporcional al cubo de la distancia media desde el Sol.
Kepler había comprendido por fin el verdadero movimiento de los planetas. Había resuelto el misterio de todo una vida.
11 LA NARIZ DE ORO
ResponderEliminarKepler acudió al castillo de Benatek, en Praga, donde vivía Ticho Brahe, el matemático del emperador Rodolfo II. Kepler miraba los adornos del pasillo y de las vestimentas de Ticho, pero lo que más le asombró fue la nariz de este. Era de oro. Ticho les dijo que cenarían hoy con él. Ya en la mesa, Kepler obserbava a los otros comensales. Cada uno hacía una tarea distinta. Entoncés, Ticho pregunto a los comensales de que se encargaría Kepler. Todos se rieron de él porque era distinto a los otros. Entoncés, Kepler le dijó a Brahe que le encargará lo más difícil. Brahe preguntó a los otros que tarea darle, y dijeron que Marte. Brahe se asombró, pero Kepler muy seguro de sí mismo, le dijo que lo haría en ocho días.
LEY DE LAS AREAS IGUALES:
ResponderEliminarKepler continuó con su obsevación de Marte, y se hacía siempre la misma pregunta.¿Porqué Marte viajaba más deprisa que los demás planetas? porfin él había comprendido que todos los planetas no viajan a la misma velocidad.descubrió que los planetas giraban en elpises,no en circulos. Así que Kepler descubrió que la línea que une el sol y un planeta recorre el espacio de manera uniforme.Esto quiere decir que cuando la distancia respecto al sol es menor, el planeta avanza más rápidoen su órbita porque siempre recorre el mismo espacio en un tiempo cualquieraAsí que Kepler puso otra ley: La linea que conecta el sol con un planeta recorre areas iguales en tiempos iguales.